En la Lonja de Sada, nos importa ofrecerte el mejor marisco fresco, y sabemos que muchos de nuestros clientes disfrutan de la centolla en las cenas navideñas. Para garantizar que puedas saborear la frescura del mar durante todo el año, hoy te explicamos cómo congelar la centolla de manera adecuada, para que conserve su sabor y textura.
Pasos para congelar la centolla de manera correcta
- Cocer la centolla:
El primer paso es cocer la centolla en agua con sal durante el tiempo adecuado. Una vez cocida, déjala enfriar a temperatura ambiente. - Enfriamiento con paño humedecido:
Para mantener la frescura de la centolla, cúbrela con un paño humedecido en agua fría. Si deseas un toque especial, puedes mojar el paño en el agua de cocción, lo que le aportará un sabor único. - Envolvimiento adecuado:
Asegúrate de envolver bien la centolla, ya sea con papel film o utilizando una bolsa zip. Lo importante es que quede sellada herméticamente para evitar que pierda sabor o se queme en el congelador. - Posición en el congelador:
Coloca la centolla en el congelador con las patas hacia arriba. Esto permitirá que el caldo que contiene se conserve de manera óptima, asegurando que cada bocado sea tan jugoso como el primero.
Con estos sencillos pasos, podrás disfrutar de la centolla de la Lonja de Sada en cualquier momento, incluso si no la consumes inmediatamente después de recibirla.
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